miércoles, 25 de enero de 2012
LOS MOMENTOS NO SE BORRAN NI SE OLVIDAN, SOLO SE GUARDAN..
DSM; Memoria
El otro día en clase con Diana dimos el tema de la memoria, me parece un apartado muy interesante ya que esta muy marcado con los sucesos de la vida, como una cosa negativa o positiva puede influir a la hora de recordarla. O como a medida que crecemos la vamos perdiendo sino hacemos nada al respecto.
Siempre deberíamos tener el cerebro en funcionamiento para que no se apaguen estas facultades, cuidarlas, porque todo lo que hagamos o no HOY, nos repercutirá en el MAÑANA.
Parece mentira también como a lo largo de nuestra vida podemos recordar un momento de la infancia con máxima nitidez y detallado.
Recuerdo...
Un día mi madre, yo y mi hermano nos pusimos a empapelar la habitación (por aquel entonces debía tener 4 años), hasta aquí muy normal todo, pero mi encantadora madre en un momento de lucidez tuvo la gran idea de cerrar la puerta, (para que no oliera todo el piso.. ¬¬'), (a cola ¬¬'), con la consecuencia de pillar un buen colocon, lo ultimo que recuerdo son las risas de ellos y yo tumbada debajo la mesa...
ADEEEEEEEEU!
viernes, 20 de enero de 2012
99/100
El niño está hecho de cien.
Cien maneras de expresión,
cien manos,
cien pensamientos,
cien maneras de pensar, de jugar y de hablar
cien, siempre cien
maneras de escuchar,
de sorprenderse,
de amar,
cien alegrías para cantar y entender,
cien mundos que descubrir,
cien mundos que inventar,
cien mundos que soñar.
El niño tiene cien maneras de expresión,
cientos y cientos más,
pero le roban noventa y nueve.
La escuela y la cultura le separan la cabeza del cuerpo.
Le dicen:
que piense sin sus manos
que trabaje sin su cabeza
que escuche sin hablar
que comprenda sin alegría
que ame y se maraville sólo en Pascua y en Navidad.
Le dicen al niño:
que descubra un mundo que ya existe
y de cien le roban noventa y nueve.
Le dicen:
que el juego y el trabajo
la realidad y la fantasía
la ciencia y la imaginación
el cielo y la tierra
la razón y el sueño
son cosas que no van juntas
Y le dicen que el cien no existe
El niño dice:
"¡claro que sí! el cien está aquí".
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